Carta de un perro a su humano de compañia

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Solo me falta hablar, dices. Si yo pudiera hablar, te diría:  ¿Qué estás haciendo con tu vida? ¿Por qué no te provees de una compañía interesante; así no tendrías que retener en un piso diminuto un perro que se harta de gemir, aullar y ladrar horas y horas , a cambio de compensarlo con algunos arrumacos y paseos escuetos un par de veces al día? ¿Por qué no te esfuerzas en tener  una vida lo suficientemente interesante como para que mi

existencia no sea una excusa? Yo no soy tu compañía, eso lo sabes muy bien tú. Soy la máxima expresión de tu soledad. Tú me das cobijo, pero yo soy tu refugio. Yo acompaño tus pasos, pero soy tu razón de andar. Pero esto no funciona. Mi naturaleza errática, rimbombante y alegre está dominada por un sentimiento que no me es propio; la expectación. Esa emoción humana me causa una angustia insoportable. Estoy ansioso porque ocurra algo que es previsible y que debe ocurrir, y a la vez sorprendido de que ocurra; cómo que vuelvas a esta casa y me saques a pasear. Y lo peor es que eso, que es inevitable, es toda mi alegría ¿sabes? En esos instantes estoy agradecido de que no me hayas abandonando, pero luego me doy cuenta que alguien que solo comparte su vida con un perro es fundamentalmente alguien sin fe. Y eso me pone triste. Por ti.

Si yo pudiese pedir un deseo, pediría convertirme en un humano; uno de compañía. Uno que pudiese acompañar la vida que tú llevas, que te hablase de cosas lindas, te diese cariño y besos, y una conversación creativa, y que te acompañase sin preguntar dónde y te esperase sin preguntar cuánto. Un humano que no le importase que llegases tarde y supiese lidiar con lo inesperado. Que disfrutase de todos tus ceremoniales, que no juzgase lo equivocado que hayas hecho ayer si hoy hicieses lo bueno de siempre. Un simple humano de compañía. Estoy seguro que eso te haría feliz. Mientras tanto, intentaré hacerte sentir que, en última instancia, además de tu perro soy la fisonomía de un agradecimiento. Pero ésto, no es la felicidad.

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